¿Sabías de la existencia de diferentes tipos de pezones? Probablemente sí y no, y aquí te lo contamos. En el caso de las mujeres, la principal función de este órgano es la lactancia materna, la cual no siempre coincide con las características de otros pezones, pero tampoco son de preocupación porque es producto de cada desarrollo humano.
¿Y a qué nos referimos con características? Pues, a los colores, tamaños y formas que componen cada tipo de pezón. ¿Es posible esto? Lo es y hoy lo abordaremos. Cada cuerpo presenta pezones diferentes, incluso, algunos de ellos padecen de cambios y se vuelven irreconocibles a su aspecto inicial con el paso del tiempo.
Tipos de pezones
Compartiremos a continuación los tipos de pezones, aclarando que ninguno debe ser interpretado como anormal, raro o extraño. Todo cuerpo presenta un pezón acorde a su desarrollo, y si el tuyo no cumple con las características de la gran mayoría de mujeres, no hay de qué preocuparse. Todo cuerpo es único y hermoso, ¡ámalo como se merece!
Pezones comunes
Es el aspecto más natural y frecuente que posee toda mujer. Su posicionamiento radica en una mínima distinción de la areola y su notoriedad es mínima. Sin embargo, ante un estimulamiento de temperatura o tacto, pueden sobresalir mucho más y notarse.
Pezones planos
Este tipo de pezón, como su propio nombre lo dice, son planos. Es decir, achatados, los cuales no suelen sobresalir hasta la estimulación común, por lo que usualmente se encuentran siempre en su mismo nivel.
Pezones invertidos
El aspecto de estos pezones se encuentran escondidos en la areola, exactamente en su interior. Y pese a que se intente estimularlos para su posterior notoriedad, no lograrán sobresalir nunca. Estos pezones tienen destinado a quedarse en su posición inicial.
Pezones unilaterales
Los pezones unilaterales hacen referencias a aquellos que no tienen simetría en sí y posee una forma diferente. El aspecto usual de estos pezones es uno invertido y otro plano. Recalcando que poseerlos es totalmente normal.
Pezones grandes
La característica de estos pezones es que son de dos centímetros de diámetro. Lo cual tampoco se debe suponer como inconveniente para su salud.
Pezones supernumerarios
Este tipo de pezón, médicamente, se conoce como politelia y se origina cuando la mujer presenta más de dos pezones. Y para evitar preocuparla, le aseguramos que no afecta ni pone en riesgo su salud.
Pezones con vellos
Pese a que es más habitual en los caballeros, las mujeres también presentan ciertos vellos alrededor de sus pezones. La cantidad de estos vellos varía en cuestión a los niveles hormonales de la misma. Y es muy rara vez que estos vellos superen a los de los varones.
¿Los colores de los pezones afectan la salud?
Así como existen los tipos de pezones, también existen diferentes tipos de colores en ellos. Esto es muy normal y común en el cuerpo de toda mujer, ¡no te preocupes! Los pezones en una mujer pueden ser rosados, marrones, rojos, violeta o incluso medios amarillentos. Y es normal que su color cambien porque es imposible que se mantenga iguales durante toda tu existencia.
Los casos de pubertad, embarazo, menopausia y cambios hormonales también influyen en la pigmentación de los pezones. No obstante, si presientes que el color no es tan normal, e incluso, tienes cierto dolor, ve al médico. Es mejor descartar posibles enfermedades o hallarlas tarde. Y si buscas una modificación en ellos, consúltalos con tu propio experto, la cirugía ha avanzado mucho y algo puede hacer por ti.
6 datos que desconocías sobre tus mamas
- El tamaño de tus senos suele ser hereditario: puedes heredar el tamaño de tus mamas por parte de la familia de ambos padres. Fíjate en la genealogía de cada integrante mujer de tu mamá y papá.
- Tus senos no tienen el mismo tamaño: del mismo modo que los pezones, los senos tienen el mismo tamaño. No existe la perfección, eso debes saberlo y constatarlo en tu misma. ¡No te atormentes!
- La grasa no es lo único que compone tus senos: los senos están conformados por grasa, sí, pero también de glándulas, tejidos y conductos. Pero a partir de los 20 años, comienzan a ser reemplazadas por más y más grasa.
- Los senos no dejarán de crecer: el desarrollo de los senos no ha terminado y se mantienen en crecimiento y constante transformación aunque no lo percibas.
- La manera de dormir puede cambiar tus senos: los especialistas recomiendan dormir boca arriba para no aplastar las mamas y cambiar indirectamente la forma eventual y común de tus senos.
- Los senos tienen capas finas: así como se estiran tus senos en la pubertad, también lo hacen en diferentes ocasiones y la piel se volverá más fina y sensible.