La principal preocupación de las personas que practican deporte o son deportista es lograr tener unos músculos más tonificados y una piel más tersa. Sin embargo, existen ocasiones muy particulares que, de acuerdo al metabolismo de las personas, este proceso tarda más de lo debido; por lo que mucho recurren en algunas técnicas de la medicina estética, como es el caso de: gimnasia pasiva.

Esta técnica era utilizada muy a menudo por los médicos deportivos, con la finalidad de mejorar o potenciar a los deportistas de primer nivel en las distintas disciplinas deportivas o competencia en el mundo. Por otro lado, podemos decir que la gimnasia pasiva es un tratamiento de pulsaciones de electroestimulación, que a menudo generan impulsos para contraer los músculos y fortalecer sus tejidos.

Es por ello que con el tiempo se ha convertido en el aleado perfecto para complementar cualquier rutina de ejercicios. Precisamente por ello, cada vez hay más personas que integran esta técnica a su rutina de entrenamiento para estimular sus músculos. En esta nota, la Clínica Saint Paul, te contará todo acerca de este moderno tratamiento de medicina estética y el beneficio que trae aplicarla tanto en hombres como en mujeres.

¿En qué consiste la gimnasia pasiva?

¿En qué consiste la gimnasia pasiva?

La gimnasia pasiva trabaja en el cuerpo a través de sistema de electroestimulación. Básicamente, por medio de impulsos eléctricos o electrodos conductivos, que estimulan directamente en la musculatura. Y esta envía señales al cerebro para que el sistema psicomotriz se active, poniéndose en modo rutina de ejercicios; es decir, el cerebro, al recibir estos impulsos, activan las fibras nerviosas que hay en nuestro cuerpo, con la finalidad de darle respuesta a las pulsaciones que viene recibiendo, por lo que buscan en los músculos que atenúen dando una respuesta a estos estímulos eléctricos. En este aspecto, el impulso se transforma en contracción, vigoriza el tejido y suprime los líquidos retenidos en él.

Actualmente, es una de las técnicas más modernas para trabajar nuestro cuerpo; además, la gimnasia pasiva es un tratamiento completamente invasivo, es decir, no presenta riesgo alguno. Hoy en día, es recomendado para las personas que practican deporte o para las mujeres que desean tonificar los músculos. Por otro lado, se sabe que también existen máquinas que se usan únicamente para activar las articulaciones, pero estás son con fines netamente terapéuticos.

Los expertos en medicina deportiva o las Cosmiatras, profesionales en medicina estética, recomiendan siempre hacer este tipo de gimnasia en contextos muy concretos. Por ejemplo, si eres de las personas que no dispone del tiempo suficiente, cuando estás enfermo o tal vez por haber sufrido de alguna lesión, puedes usar esta técnica para evitar la reducción de la masa muscular. También, como habíamos explicado al inicio, se puede usar para complementar la práctica deportiva durante la semana. Así se podrá seguir entrenando desde casa, pero no de forma exigente y dura como los otros días.

¿En qué lugares se aplica este sistema?

¿En qué lugares se aplica este sistema?

En una de las preguntas que los pacientes no hacen en nuestros canales de atención y hoy vamos a develar esta pequeña duda. Primero, es vital, informales, que cada sesión dura aproximadamente entre 30 a 45 minutos. Segundo, las principales zonas que se pueden trabajar con esta técnica son: los glúteos, caderas, estómago, piernas y brazos. Para finalizar, luego de aplicar este tratamiento, es decir, de haber recibido las contracciones en los músculos por un corto periodo de tiempo, es cuando se reafirman la musculatura y se tonifican esta zona del cuerpo. Así, actúa (a la vez) de manera completa en el tejido que se espolea.

Por lo general, se aplica en los músculos porque son zonas del cuerpo que son difíciles de tonificar con la práctica de ejercicios; y no solo eso, lo que también se busca según lo que manifiestan los pacientes es incrementar la elasticidad de la piel. Sin embargo, estás áreas son consideradas, las zonas que presenta mayor flacidez y las que más se trabajan en los tratamientos de adelgazamientos. Tanto para suprimir la celulitis, como para drenar la parte linfática facial y corporal.

Candidatos para someterse a un tratamiento de Gimnasia Pasiva

Son todas las personas que tienen un cuerpo con ‘excesos de grasa’, ‘alas de murciélago’, glúteos caídos y celulitis en sus cuerpos; debido al sobrepeso o, en el caso de las mujeres, por haber pasado por el embarazo; siendo el requisito principal estar bien de salud.

Proceso de una Gimnasia Pasiva

Proceso de una Gimnasia Pasiva

Durante las sesiones estéticas se coloca unos electrodos sobre la parte del cuerpo del paciente (zona con ‘exceso de grasa’ o flacidez de músculos); y los cuales están conectados a unos cables por los que se emite frecuencia eléctrica; contrayendo al músculo de forma involuntaria.

Con esta medida se tonifica y reafirma los músculos de los pacientes y si, en ese proceso, se desea eliminar la ‘grasa localizada’ del cuerpo, se aplica unas corrientes continuas.

Beneficios de un tratamiento de una Gimnasia Pasiva

Los principales beneficios son:

  • Reduce la cintura.
  • Reafirma, senos, glúteos y abdomen.
  • Tonifica los brazos y tórax.
  • Recuperación Post – parto.
  • Reduce los niveles de celulitis.
  • Oxigena los tejidos.

Contraindicaciones

Las personas que no se pueden someterse a este tipo de tratamiento:

  • Embarazadas.
  • Con úlceras.
  • Personas con metástasis.
  • Con marcapasos.
  • Personas con trombosis.

¿Quieres indagar y conocer todos los beneficios que trae la gimnasia pasiva? Ven y descúbrelo en la Clínica Saint Paul, poniéndote en contacto con nosotros a través de nuestro WhatsApp al número que aparece en pantalla (+51) 950895893

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