La rinoplastia es uno de los procedimientos de remodelación del perfil facial más demandado, por los evidentes cambios que produce en el aspecto del paciente, pero es a la vez una intervención que puede mejorar la función respiratoria.

Consiste, fundamentalmente, en modificar las estructuras óseas y cartilaginosas nasales para conseguir una nueva forma que mejore la armonía facial. La operación se realiza habitualmente bajo anestesia general, si bien en casos concretos se lleva a cabo con anestesia local y sedación.

¿Cómo se Realiza el Procedimiento?

El procedimiento suele tardar de una a dos horas. Al empezar, puede aplicarse anestesia general o local. En el caso de la local, normalmente se insensibilizan únicamente la nariz y él área circundante, y por lo tanto el paciente permanece despierto durante la operación, aunque probablemente sedado.

Existen dos tipos de Rinoplastia:

  • Rinoplastia Abierta: Con una rinoplastia abierta, el cirujano tiene una vista completa y expuesta de las estructuras internas de la nariz. Para ello, se realiza una amplio corte que une las incisiones en ambas fosas nasales, con el fin de elevar la piel de la región nasal inferior anterior, facilitando la manipulación del hueso y los cartílagos nasales, principalmente en casos complejos.
  • Rinoplastia Cerrada: Una rinoplastia cerrada se realiza con solo incisiones en ambas fosas nasales, y permite corregir la mayoría de los problemas menores. Las cicatrices permanecen ocultas y rara vez son visibles, lo cual es una ventaja considerable sobre la rinoplastia abierta, donde las cicatrices suelen ser más visibles.

Antes y Después de la Rinoplastia

Antes y Después de la Rinoplastia

Al final de la cirugía, se coloca un yeso para proteger la nariz, que se eliminará entre 6 y 7 días. Estos vendajes ayudarán a que los tejidos nasales y los huesos se alineen en la nueva forma adoptada. Además son una precaución necesaria contra la acumulación de líquido.

Una vez que se elimina el yeso; la nueva forma de la nariz comenzará a notarse pero es posible que asiente una nueva posición después de dos semanas. A partir de entonces, y hasta 12 semanas, verá pequeños cambios en el transcurso de los días; a medida que los efectos posteriores a la cirugía se vuelvan más visibles.

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