Criolipólisis y Lipoláser: ¿Qué diferencias hay?

Muchas personas se preguntan: ¿Criolipólisis o Lipoláser? ¿Cuál es el tratamiento más eficaz para eliminar grasa localizada? Esta duda es frecuente, sobre todo con la llegada de la temporada de primavera y verano, cuando se busca lucir una figura más definida. Aunque ambos tratamientos buscan reducir adiposidades, sus mecanismos de acción son diferentes y cada uno se adapta de forma distinta al cuerpo de cada persona. Por ello, es importante conocer cómo funciona cada técnica antes de decidir cuál es la más adecuada.

Además de la Criolipólisis y el Lipoláser, existen otros métodos estéticos para eliminar grasa localizada, como ciertos tratamientos de medicina estética y la cirugía plástica, que también pueden ofrecer resultados efectivos dependiendo del caso.

En términos de funcionamiento, la Criolipólisis utiliza frío controlado para estimular el metabolismo y descomponer las células de grasa de manera natural, mientras que el Lipoláser aplica calor mediante láser para romper las adiposidades y favorecer su eliminación. Conocer estas diferencias es clave para elegir el tratamiento más adecuado, garantizando resultados seguros, visibles y duraderos.

Tratamiento Estético: Criolipólisis y Lipoláser

Muchas personas no se sienten satisfechas con la acumulación de grasa localizada en áreas como el abdomen, brazos o piernas. Encontrar una solución definitiva puede ser complicado, especialmente en la vida moderna donde el tiempo es limitado. Para elegir el tratamiento más adecuado, primero es importante entender qué son las grasas localizadas o adiposidades.

El cuerpo humano no solo está formado por músculos, huesos y órganos; también contiene grasa, cuya función principal es almacenar energía que el organismo utiliza en sus actividades diarias. Además, cumple un rol protector, recubriendo los órganos vitales y actuando como aislante frente al frío.

Estas grasas están formadas por células especializadas llamadas adipocitos, que desempeñan un papel clave en el metabolismo. Sin embargo, debido a factores genéticos o del estilo de vida, estas células pueden acumularse de manera excesiva y poco estética. Esta situación puede darse por un exceso de calorías o por un aumento de la resistencia a la insulina, lo que provoca que los adipocitos crezcan hasta diez veces su tamaño normal, generando depósitos de grasa visibles en zonas como caderas, abdomen, nalgas y muslos.

Factores que influyen en la acumulación de grasa localizada

La acumulación de grasa localizada en el cuerpo puede deberse a múltiples factores que afectan el metabolismo y la distribución de adiposidades. Entre los más importantes se encuentran:

Genética

Los estudios muestran que las personas cuyos padres presentan adiposidades suelen ser más propensas a desarrollar esta misma tendencia, heredando cierta predisposición a acumular grasa en áreas específicas del cuerpo.

Estilo de vida

Una alimentación rica en carbohidratos refinados, azúcares y grasas saturadas, junto con la falta de ejercicio físico o sueño insuficiente, puede favorecer la acumulación de grasa localizada, dificultando su eliminación.

Hormonas

El desequilibrio hormonal, como el que ocurre durante la menstruación, la menopausia o ciertos trastornos endocrinos, puede incrementar la deposición de grasa en zonas específicas del cuerpo.

Edad

Con el envejecimiento, el cuerpo pierde masa muscular y tiende a acumular grasa localizada, especialmente en áreas como abdomen, caderas, nalgas y muslos, donde ya suele ser más evidente.

¿Qué es la Criolipólisis?

La Criolipólisis es un tratamiento estético diseñado para eliminar depósitos de grasa localizada en distintas zonas del cuerpo. Su mecanismo se basa en exponer las células grasas a bajas temperaturas, congelándolas para que posteriormente sean descompuestas y eliminadas gradualmente por el organismo a través de la orina.

Muchos pacientes se preguntan si la aplicación del frío resulta molesta; la respuesta es no, ya que antes de iniciar el tratamiento, la cosmiatra coloca una membrana protectora que evita cualquier sensación de incomodidad en la piel.

Este tratamiento es versátil y puede aplicarse en cualquier área del cuerpo, aunque las zonas más comunes son abdomen, muslos y brazos. Los resultados son progresivos, dependiendo del metabolismo y sistema urinario de cada persona, y pueden observarse entre dos y cuatro meses después de la sesión.

¿Cómo actúa el Lipoláser?

El Lipoláser es un tratamiento estético muy efectivo para reducir grasa localizada y corregir problemas como celulitis, michelines, papada y cartucheras. A diferencia de la Criolipólisis, esta técnica utiliza láser de alta precisión con diferentes longitudes de onda que estimula directamente las células grasas.

Durante el procedimiento, se genera lisozima, una enzima que transforma la célula grasa en ácidos grasos esenciales, los cuales son convertidos por el cuerpo en energía vital. Por ello, se recomienda combinar el tratamiento con ejercicio físico o electroestimulación para optimizar los resultados.

Una de las grandes ventajas del Lipoláser es que, además de reducir la grasa, tensa y estira la piel, disminuyendo arrugas y mejorando la firmeza. Esto se logra porque el láser coagula los vasos del tejido adiposo y estimula la producción de colágeno.

Este método es no invasivo y prácticamente indoloro, sin dejar marcas en la piel. Los resultados se observan de manera progresiva tras cada sesión, y al igual que la Criolipólisis, puede aplicarse en cualquier zona del cuerpo para lograr una mayor firmeza y contorno corporal.